Siento el cosquilleo que entra por mis venas, también siento
las ganas de llorar, pero tengo que ser fuerte, debo seguir adelante debo
montar en mi caballo y cabalgar hasta que me pierda en el horizonte, aquella
imagen me ha dejado tocada, siento que me falta algo que no debería... y ya
estamos otra vez con los signos de arrepentimiento. Cierto, el subconsciente me
traicionó ¿ y qué? quizás lo hubiera
hecho de otro modo y todo hubiera sido peor, quizás todo hubiera cambiado,
quizás no estaría preguntándome todas estas cosas ahora y quizás sería más
feliz, ¿y qué? no todo se basa en un momento estúpido en el que no tuviste el
pulso suficiente para marcar con una cruz en rojo, en un momento en el que el
aire soplaba hacia otra dirección y el desagradecido de Cupido tuvo la mala
pata de enviar la flecha en una sola dirección, la vida es como una línea, el
conjunto de muchos puntos juntos y cada situación y cada sonrisa es un punto
algunos buenos otros malos, desesperantes, divertidos, locos de cualquier forma
color e intensidad la vida es lo que pasa mientras tú piensas en el pasado y te
martirizas con tu sentimiento de culpa y arrepentimiento.
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